DANTE
NAPOLEÓN PINO ARCHONDO
Cuando aquel
6 de enero de 2006 Evo Morales asumía el mando presidencial, pocos o casi nadie
podían imaginarse lo que ocurriría después. No fue una elección más. Fue la
elección para el MAS. Control de dos tercios en el Congreso Nacional. Control
absoluto del Poder.
Darle todo
esto a un dirigente cocalero, cuya trayectoria estuvo signada por la violencia provocadora,
fue un tremendo error. El pueblo también se equivoca.
Quince años
después, los bolivianos estamos tratando de saber si todo fue una pesadilla o
si estamos despiertos y fue una realidad. Tanta agua ha corrido por debajo que
es difícil explicar todo de golpe.
Lo cierto es
que tuvimos en nuestras manos una riqueza jamás soñada y la vimos esfumarse
como ese gas que salió de las entrañas de la tierra y se fue a otros países para
generar riqueza. Nos quedamos con las manos vacías y una sensación de haber
sido engañados por un destino cruel.
Parece cuento
de niños, esos que se crean con el fin de dar una lección de vida. No llegamos
para ser inquilinos sino para quedarnos, dijo Morales anunciando la tormenta. Y
acto seguido impuso una nueva Constitución, se inventó una nacionalización del
gas, planificó y ejecutó la persecución a los dirigentes sociales y políticos
adversos, sometió a la justicia para servirle de manera abyecta, corrompió a
las FFAA, a la Policía Nacional, expandió la siembra de la coca por todo el
territorio nacional y derrochó toda la riqueza que el gas puso en sus manos.
Este resumen
trata de explicar por qué nos preguntamos si fue una pesadilla.
Y hasta aquí
llegamos. Donde la conducta de la negación convierte la verdad en mentira y al
revés. El referéndum que le dijo No a su reelección fue una violación a sus derechos
humanos, el fraude que ejecutó en defensa de sus derechos humanos inventados, fue
golpe de Estado, el hijo que tuvo nunca existió, la corrupción de su gobierno
un invento de la derecha neoliberal y la protección al narcotráfico la guerra
sucia del imperio en su contra.
Con estos
antecedentes, el censo de población y vivienda, que debía ser un mero acto administrativo,
se convirtió en la lanza de lucha contra la mentira organizada. La
cuantificación de la población el año 2012 no fue realizada con probidad. Los
datos censales se usaron para inventarse poblaciones rurales con mayor numero
de habitantes, que le dieron control del parlamento por la forma en que se
decidió la distribución de escaños y les restó recursos económicos a los
departamentos con mayor población.
La demanda
cruceña de censo el 2023 no fue un pedido insulso, no fue buscar un pretexto
para crear un problema, fue un acto de rebeldía ante el engaño y la mentira, de
hacer política en base al fraude. Y de exigir los derechos otorgados por ley.
Esto es lo que no se entiende a nivel nacional. Santa Cruz tiene 29 días paradas
sus actividades privadas. Pidió a todos su apoyo.
No obtuvo el
respaldo solicitado. Están solos. Pero tienen la verdad. En estos días de paro
pudo obligar al gobierno a develar sus mentiras, sus engaños, sus actos de
barbarie social, la violencia fratricida desde la policía a su pueblo, en fin,
todo lo que hacen los tiranos cuando ven amenazado el poder que mal detentan.
Tuvo que
suceder en algún momento el choque de trenes. De esas dos visiones nacionales
distintas, entre el modelo productivo, social y comunitario del MAS y el modelo
productivo, liberal y creador de Santa Cruz. Ahí está el meollo de todo.
El censo es
una pieza del rompecabezas, porque aclara la figura, y no le conviene al gobierno
que suceda. El MAS enraizado en la ideología castro chavista quiere hacer del
Estado el todo. Santa Cruz quiere liberar sus fuerzas productivas de las garras
el Estado. El MAS quiere someter al pueblo a sus caprichos comunistas y Santa Cruz
quiere libertad y progreso. El MAS quiere el control total del territorio para
expandir el narcotráfico al que se debe, Santa Cruz quiere sanear eso.
La fecha del
censo no es entonces algo superfluo, sin sentido, como quiere hacer ver el
gobierno. Es la clave que en pocos meses destapará las verdaderas intenciones
de una organización criminal que bajo la forma de organización política ha
tomado el gobierno de Bolivia.
SANTA CRUZ VIVE,
LA LUCHA SIGUE!!